Elegimos hacer la excursión a las Ruinas Jesuitícas de Lules bien temprano en la mañana para hacer todo el recorrido que habíamos planeado hacer.
Pero lo cierto es que las vistas de las sierras y la abundante vegetación nos alentaron a detenernos a disfrutar del paisaje y reorganizar a medida que avanzábamos en el trayecto.
Por cierto, el acceso y visita guiada son gratis, aunque podés dejar una suma de dinero a modo de colaboración.
Dónde quedan las Ruinas Jesuíticas de Lules?
Muy cerquita de la ciudad de Tucumán, y después de recoger el auto que alquilamos en KINTO de Toyota, tomamos la ruta 301 pasando por Obanta y el Ingenio San Pablo.
No vimos cartel indicador de acceso a las Ruinas, por lo que te sugerimos usar el Gps para no pasar de largo, ya que el acceso es antes de llegar al pueblo de Lules.
Un poco de historia sobre las Ruinas de Lules
A fines de 1585, con la creación del Obispado de Tucumán, los Jesuitas se instalaron en la zona para su campaña de evangelización, permaneciendo en Lules por mas de 150 años, hasta su expulsión ordenada por el Rey de España Carlos lll.
Cabe aclarar que toda la orden Jesuítica fue expulsada del territorio que dominaba la corona española.
Los bienes de la orden (estancias y sus edificios, ademas de objetos) se confiscaron y enviaron a los sacerdotes a Buenos Aires en calidad de presos.
Años después, la orden de los Jesuitas se suprimió por el Papa Clemente XIV.
La misión o estancia de éstas Ruinas se fundó en 1670 aproximadamente y hoy día es un testimonio de la época de la conquista española.
Qué pasó después de la expulsión de los Jesuitas?
La estancia fue entregada a la Orden de los Dominicos que se hicieron cargo del convento, pero no conservaron todo tal cual lo habían dejado los Jesuitas.
Por 1910 los Dominicos también dejaron la estancia, quedando abandonada hasta que años después se decidiera recuperar el edificio y la historia.
¿Qué ver en las Ruinas Jesuitícas de Lules?
Lo primero que visitamos fue el Templo.
No es la construcción original de los Jesuitas, sino una intervención posterior que estuvo a cargo de los Dominicos.
Cabe destacar que en el templo se conservan imágenes religiosas como la Virgen de Nuestra Señora del Rosario y la imagen de San José con el Niño Jesús que esta ubicado en el tabernáculo.
En el recorrido nos comentaron que en 1985 la asociación de amigos de las Ruinas lograron recuperar el tabernáculo y el altar que estaban en Santiago del Estero, para traerlo a su sitio de origen.
Saliendo del Templo, pasamos a los patios donde pudimos ver las Ruinas del antiguo convento. Solo quedan algunas paredes en pié que guardan historias del lugar.
Allí se quedaron el Gral. San Martín cuando estaba a cargo del ejército del Norte y las tropas del Gral. Belgrano. También se alojó Fray Justo Santa Maria del Oro, diputado por la Provincia de San Juan, durante el Congreso de Tucumán de 1816.
La importancia histórica de éstas Ruinas se deben también a las tareas de evangelización realizadas por los Jesuitas con los aborígenes nativos, los Lules y porque allí se introdujo por primera vez el cultivo de la caña de azúcar, una de las industrias mas importantes de la provincia de Tucumán hoy en día.
Adicionalmente allí habría funcionado el primer colegio de institución pública del país, pero éste no es un dato certero para nosotros.
En la Provincia de Tucumán existen otros vestigios de la presencia de los Jesuitas que también vale la pena conocer:
- la Capilla de San Ignacio de Loyola en La Cocha
- la Capilla de La Banda en Tafí del Valle, sin embargo, ambos nos han quedado pendientes para otro viaje.
Esperamos que te haya gustado ésta Excursión a las Ruinas Jesuíticas de Lules y haberte contagiado las ganas de seguir descubriendo Argentina y su historia, así que te invitamos a que nos sigas en nuestras redes sociales para seguir viajando juntos!
